Medio siglo parece una eternidad y sin embargo pasa volando.
Hace la friolera de 50 años, con sus 50 noches. Con días soleados, lluviosos y secos.
Con sus días dulces y amargos. Con varias lunas, ocasos y amaneceres, nació una niña feúcha y llorona que por nombre la pusieron Isabel. Isabel fue creciendo y poco a poco se fue convirtiendo en una niña pecosa, de cara dulce, y ojos vivarachos. Su vida fue una vida más, con sus días buenos y malos. Para que lamentar el pasado si ya pasó. El presente es lo que importa y es lo que hay vivir al máximo.
Ella no iba a ser menos que los demás y sueña, sueña que quiere volar. Aunque a veces tiene miedo y prefiera estar a ras de suelo. En alguna ocasión voló y cayó a la tierra en picado. Es inteligente y sus vuelos no son muy altos. Suele quedar a mitad del camino. Los coscorrones son livianitos. Y cuando el último coscorrón de la última caída ya ha curado, emprende de nuevo vuelo.
Los petalos de rosas, aquí, en esta situación son como la vida en un remolino y a punto de desaparecer tragados por la corriente que nos engulle por no haber sabido retirarnos a tiempo.
Isa
Caminar mucho y sin rumbo aunque nos pongan una alfombra de pétalos de rosas, es cansado,
puede llevarnos a la deriva.
Isa
Isa
Hay que tomar de la vida lo que nos va ofreciendo.
Sólo despreciar aquello que no nos guste, y pensemos que nos puede hacer daño mental y emocionalmente.
Isa
La abejas degustaron muchas plantas de diversos sabores, ahora les quedan las flores de las zarzas.
De esas flores saldrán zarzamoras negras. A veces las cosas desagradables tienes su punto dulce.
Las zarzas tienen espinas, pero tambien un fruto jugoso.
Isa
Es bueno de vez en cuando pararse y meditar. Dar la espalda al mundo y sentirse el único ser del universo.
Isa
Así es como todo el mundo va madurando y va aprendiendo que hay que vivir pero que en esta lucha, a veces recibimos bofetadas, y no siempre hay que poner la otra mejilla, que llega un momento que se poner morada de tantos golpes. A veces toca dar y que reciban otros las tortas o galletas. Todos ser viviente ha de ir madurando a base de golpes, tropiezos y de vez en cuando, algún que otro caramelo. Bueno yo creo que ya me tocan todos caramelos, que con cincuenta años ya estoy como una breva bien madura y a punto de ser degustada. Yo no creo que reciba más caídas, o tal vez aun me espere la caída más alta de mi vida. De momento entro en el medio siglo con la ilusión de que todo será hermoso, bonito y que no habrá contratiempo, porque estos ya forman parte del pasado.
Si tienes la paciencia de la tierra, la pureza del agua y la justicia del viento, entonces eres libre.
Paulo Coelho
El agua es el vehículo de la naturaleza.
Leonardo Da Vinci
Fotos de este fin de semana
