Ya sé que las cosas de los ancianos no interesan tanto como las de sexo, pero tengo que hablar...

Resulta que va para tres meses que mi amiga Flor,  nombre ficticio,  está ingresada. Flor es una abuela de 80 años que visito como voluntaria,  fue  ingresada  primero en el hospital de aquí desde la población que escribo, y después en la Clínica SEAR que está en la   Autovía a Colmenar Viejo, Km 16.
Cada vez que la visito o hablo con ella, mi corazón sufre. Yo como no soy su familia no puedo hacer nada, todo lo más denunciarlo desde aquí. Yo entiendo que el presupuesto está muy reducido y que hay menos personal en los hospitales y clínicas, pero aun así los/las pacientes siguen siendo personas humanas que sufren, ríen, lloran,...

Yo entiendo que una abuela sea pesada y solicite atención. y por eso les resulte demasiado pesada y no le hagan caso a cada instante. Entiendo que por su seguridad los tengan amarrados con un cinturón en los sillones cuando los levantan. Lo comprendo pero no lo comparto. Si yo estuviera en esa situación, preferiría romperme la crisma a estar atada. Una ve ciertas cosas que temblando está de   hacerse mayor y caer enferma, y por este motivo, no pienso hacerme mayor ni caer enferma. Llegado el momento ya me las apañaré para quedarme una noche dormida, o dejar de respirar sin más. Ya lo hemos hablado mi compañero y yo. Pero lo que no es de recibo, es de que por h o por b, a esta abuela hoy se le haya caído la bandeja de la comida. La hayan echado una buena reprimenda, y encima, la hayan dejado sin comer nada. Esto es incompresible. Parece que en lugar de estar en una clínica apurando sus últimos días, meses o años de vida, esté pagando una pena, una condena por hacerse mayor. Señor mio, si nunca se le ha caído la comida, tan solo hoy, y no ha sido culpa suya según me ha comentado por teléfono, si no porque quien le lleva la comida, ha puesto la bandeja al borde de la mesita.

Ella está atada en el sillón su movilidad es reducida, y encima hoy que era el primer día que le llevaban patatas guisadas con pollo, todo un manjar para ella, pues lleva comiendo tres meses lo mismo. Un plato de puré, de segundo otro plato de puré, y de postre más puré de frutas. Hoy al oler la comida se ha entusiasmado y en el afán de comer esas ricas patatas con pollo, la bandeja ha ido al suelo, supongo que porque se ha apoyado un poco más de la cuenta en la mesita. Hoy desde el desayuno hasta la merienda, ha estado con el estomago vacío. Yo fui ayer a verla, si eso la ocurre ayer la compro en la cafetería algo y se lo doy.

La persona que hoy le ha puesto la bandeja al borde por no quitar las cosas que tenía en la mesita, creo que ella debe de pasar por la misma situación, verse en las mismas circunstancias, y que  la den el mismo trato, así se daría cuanta de lo mal que lo pasa una persona enferma y sola con las malas contestaciones, y el mal hacer con ellas.

No me ha quedado más remedio que ponerlo aquí, si no lo hago, esta noche no podría dormir. Y como no sé donde puedo denunciar esto, pues lo hago publico. Aun así, he puesto una queja en la pagina de esta Clinica, no sé si harán caso, o harán oídos sordos. Esto es una injusticia, que seguro si tiene a un familiar no le sucede, pero como no tiene familia que vaya a visitarla, ni que esté por ella, pues pasa lo que pasa.
Cuidado que no digo que esto suceda cada día, pero hoy ha sucedido, y lo comunico aquí.Tal vez algunas personas deberían estar cuidando  cerditos,  o cabras, con mi respeto para estos animales, y no cuidando enfermos en los hospitales.