sábado, 8 de agosto de 2009

En contacto permanente con la naturaleza



La belleza que nos colma los ojos, satisface el alma y lo calma. El día que pacientemente estuve contemplando aun con sol la montaña y mi pueblo, y despúes vi ésta maravilla, por la noche dormí como un liron/a. Estoy satisfecha por ser tan feliz y poder disfrutar de lo bella de la naturaleza. De poder distinguir el día de la noche. De poder tener un lugar en donde pasar las vacaciones.



La luna me sorprendió al terminar de hacer la foto de arriba. Giré y me topé con la luna que estaba a mi espalda, y que le había robado al sol su color de un fuerte amanecer. Estaba de un color anaranjado que parecía que se hubiera fusionado con el sol, o que éste en una ataque de pasión le hiciera el amor.

Subimos en burro, reimos, nos divertimos sin tener grandes cosas. La felicidad se consigue con los pequeños detalles del día a día. La felicidad no nos la da una joya en un determinado momento, o por un cumpleaños si los dias anteriores o siguientes, fueron o serán calamitosos, tampoco seremos felices si no podemos robar de vez en cuando un beso, una caricia, un te quiero. No se puede ser feliz solo en fechas puntuales, hay que serlo todos los momentos del día con los pequeños detalles que la vida nos va brindando.


Aquí está mi amiga montando en Gitano. Este día nos reímos y lo pasamos muy bien. Estoy convenciendo a mi compañero para que me acompañe al Pico de San Vicente, está a 1.300 metros de altitud sobre el nivel del mar. Y quiero que me acompañé él, así si necesito ayuda para llegar a la cima, él me da la mano y tira de mí. Me encanta andar y subir montañas, pero no me es facil llegar a las metas, necesito más tiempo que los demás por mis valvulitas de metal. Pero llegar llego, y para mí es toda una gozada.La adrenalina bulle en mi interior pensando que sí lo lograré. Y cuando llego me relajo como si tuviera un dulce y hermoso orgasmo.


He aquí dos guapos jinetes. Les pedimos los caballos para montarlos, pero no estaban por la labor de dejarlos

martes, 4 de agosto de 2009

La luna de mi pueblo







El día finaliza y la luna nos da la bienvenida.
Ella es la reina de los cielos de mi pueblo.
La que me guia en las noches para no perder el rumbo.
La espectadora de los besos que me regala el viento.
La que me acompaña cuando miro a las estrellas.
La que me da las buenas noches,
y me arropa en las madrugadas.
Ella siempre está presente si no hay una nube,
que se cele de la luna,
y la ponga una venda para que no vea.
Los grillos le cantan una nana.
La luna tiene su ojo bien abierto y sus oidos apagados.
Baja a beber de la fuente de los manantiales.
Se enreda entre los árboles.
Monta en los caballos,
y se la ve por los senderos con su gran velo blanco.

domingo, 2 de agosto de 2009

Monologo




Monologo:

Hola buenos días, hace un esplendido sol
Anoche tuve que taparme con sábanas de otoño, y digo otoño, porque son sábanas con hojas de color amarillo caídas de las ramas de los árboles de hoja caduca.
A pesar de tener apariencia seca, al rebujarme en ellas, su sonido es sordo. Ningún ruido, se confabularon, y el silencio reina tapando mi cansado y adormecido cuerpo
Hace fresco. ¡¡aquí se duerme de maravilla!! No me ahoga ni tortura mi propio sudor como durante el día y las noches en Madrid.
Al despertar el sol ya ha despuntado y las golondrinas se acercan raudas y veloces a mi ventana.
En el ambiente hay un susurro dulzón de besos, piruetas y cariños, que en su ir y venir, algo atolondradas por la alegría al verme asomada a la ventana, envuelven el ambiente como si de pequeñas partículas se tratara.
El campo también te da los buenos días. Los árboles me cuchichearon al oído beldades. Me dicen que ya te reconciliaste con tu esposa. Y un gorrión me trajo una rama de tu aguaribay.
En una de las hojitas viene un mensaje escrito que dice, que ayer por la mañana, esa hoja miraste, y en ella depositaste ternura. Me dice el gorrión que cada amanecer, antes de que la última estrella se adormezca, sales al jardín y allí le haces el amor.

Yo hoy le pedí un deseo al SOL, que se acercara por los países en donde hace mucho frío, en uno de ellos vives tú. Él irá depositando rayos que desprenderán calor. Me contestó que en cuanto amanezca, cruzará el charco y allí parte de su energía irá esparciendo. También le envié un gran beso y mis mejores deseos para que seas muy feliz.
Las golondrinas no se dejaron fotografiar, pero seguro alguno de estos días, alguna al verme un regalo me hará. Y cuando yo pueda captarlas volando cerca de mi ventana, enviare la foto como signo de libertad.

Ahora envió fotos de la fiesta a la que acudimos ayer. Pediré permiso y si me dan, pondré alguna foto de los novios, mientras tanto envío es del paisaje del lugar en donde se celebró, y fotos de mi pareja, una servidora y mi amiga.